No sé si te ha pasado a ti, pero mucho escuchamos decir “estos son los mejores fondos de inversión” y te invitan a invertir por su alta rentabilidad, pero como decía la abuela, ¡ver para creer! por eso antes de invertir tu dinero debes conocer más a fondo
¿Cómo se calcula la rentabilidad de los fondos de inversión?
Lo primero que debes conocer para poder calcular la rentabilidad de un fondo de inversión es el valor que tiene en el mercado cada uno de los activos o participaciones en la que inviertan. Para ello hay muchas páginas webs, medios de prensa y comunicación que puedes consultar y seguro la sociedad que administra el fondo tiene publicado estos valores, pero en todo caso es algo que tú puedes verificar. Para ello debes dividir el patrimonio total entre el número de participaciones que hay en el momento que vas a calcular el valor del mercado y vas a obtener como resultado un valor que en el mundo de las inversiones se denomina “valor liquidativo”. Este valor se calcula diariamente, de hecho, la entidad gestora tiene la obligación de hacerlo publico en los boletines de las bolsas de valores y en su página web. Aunque hay fondos que por su naturaleza y/o las características de los activos en los que invierte, calculan este valor liquidativo con una periodicidad superior.
Este valor liquidado es la base para calcular la rentabilidad del fondo de inversión que puedes obtener de invertir en ese fondo ya que esta se calcula teniendo con el valor liquidativo de la fecha de suscripción y reembolso del fondo de inversión. Mediante la siguiente fórmula:
La rentabilidad de un fondo de inversión
Es importante que conozcas también que la rentabilidad de un fondo de inversión depende principalmente de la volatibilidad que posea dicho fondo, es decir, las variaciones que históricamente ha experimentado este valor; por lo que mide las desviaciones que ha experimentado la rentabilidad por las fluctuaciones del mercado.
La volatibilidad suele medirse con términos estadísticos, a través de la desviación y se expresa en porcentaje. Cuando la desviación se aleja de cero, la volatibilidad es alta, por lo que el riesgo aumenta; sin embargo, cuando la volatibilidad es baja, se puede afirmar que la rentabilidad de los activos del fondo ha sido mas estable y parecida, por lo que presenta un riesgo menor. Los fondos más volátiles son los que basan sus inversiones en la renta variable, por lo que su rendimiento va a depender de los movimientos de las bolsas. Por otro lado, las inversiones de renta fija tienen una menor desviación, especialmente aquellas a corto plazo, motivo por el cual generan menos intereses.
Con esto no quiero sesgarte ni que consideres inadecuado un fondo colocado en renta variable y mucho menos que un fondo con renta fija es 100 por ciento seguro. Lo que trato es que tengas herramientas a la hora de seleccionar un fondo a fin de que posea un adecuado balance entre rentabilidad y riesgo o al menos el que estés dispuesto a asumir.
La rentabilidad de un fondo de inversión dependerá del riesgo con el que se mueva en el mercado, ya sea aportando su patrimonio a renta fija, variable o a una mezcla de ambas. Una vez realizadas las inversiones, serán los movimientos del mercado los que determinen si generan mas o menos rentabilidad y serán los gestores los que aumenten o disminuyan las posiciones a conveniencia del fondo.
Para tener en cuenta
Para terminar, a título de ejemplo entre rendimiento, volatibilidad y riesgo, quisiera compartir contigo el caso de los fondos de la categoría VDOS de Renta Variable Internacional Latinoamérica Renta 4, los cuales para el cierre del primer trimestre 2018 han sido los más rentable en la región, generando un 4,81 por ciento de rentabilidad en este periodo.
Estos invierten entre un 75 y un 100 por ciento de su patrimonio en renta variable principalmente en los mercados emergentes latinoamericanos, como Brasil, México, Argentina, Chile, Perú o Colombia. La parte que no invierten en renta variable se asigna a renta fija pública o privada. La mayor parte de su patrimonio lo invierten a través de las bolsas locales o a través de American Depositary Receipt (ADRs), títulos que representan un número de acciones de empresa que cotizan en Nueva York, principalmente en sectores como consumo, infraestructura, seguros y servicios financieros o de tecnología. La evolución por rentabilidad de este fondo de inversión lo sitúa entre los mejores de su categoría, registrando a tres años una volatilidad de 21,28 por ciento, que a pesar de haberse reducido a 13,75 por ciento en el último año, refleja el riesgo del fondo.
